domingo, 7 de junio de 2009
!Qué mala consejera es la envidia Sanchico!
Foto Abejita de la Vega (María Ángeles Merino) Realizada en las orillas del Arlanzón, en época de pelusas y pesca.
Mi viejo me llevó a pescar y, entre tanta pelusa, me habló de la envidia.
Ele Bergón (Luz del Olmo) dijo...
Mi viejo tiene razón !Qué mala consejera es la envidia Sanchico! El Richi, la Vane, mi ex-Churri, alguno que otro más, en vez de alegrarse por lo bien que me lo paso con vosotros, me miran y me dicen que estoy pirao y que les aburro con mis tonterías. Sobre todo he notado que les sienta mal el que me haya dado por leer algo y tomarme más en serio eso de estudiar. Puede que sea un un pelma. No os digo que no, peto también entre ellos les noto que no se aguantan. Muy amigas la Vane y mi ex Churri, pero a veces se tiran cada pulla que ya ya. Si alguien es mi amigo ¿por qué no voy a alegrarme de las cosas buenas que le pase? No entiendo mucho eso de la envidia aunque ahora que lo pienso, cuando mi a hermana Teresa
la hacen más caso mis padres a ella que a mi pues ....me da rabia.
Anda que al tal Avellaneda - qué no se sabe quién es- ¿no? ya le vale hacer otra parte del libro del Cervantes que ya está escrito y además es un cobarde porque no firma con su verdadero nombre.¡Menos mal que el Cervantes sabe estar a la altura de las circunstancia! A mi padre no se lo puedo nombrar. ¡Se pone de una leche!
Bueno que ya me enrollo tanto como vosotros. Todo se pega.
Choque de manos.
El Sanchico
Pedro Ojeda Escudero. dijo en este blog:
Y cómo me gusta que te enrolles, querido Sanchico.
Quién sabe si no fue la envidia, sino la venganza...
Gracias, Pedro, en nombre de Sanchico y de Luz del Olmo (alias Ele Bergón)
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9 comentarios:
Mala consejera es la envidia. Pero así son las cosas.
Poco se puede hacer al respecto.
Un abrazo
"La envidia està flaca y amarilla porque muerde pero no come".
Buena frase de la que no recuerdo ahora el autor. ¿No estará en el Quijote y ahora no me acuerdo?. No sé.
Las historias de Sanchico, ¿no las escribía Ele Bergón?.
El Alhzeimer, creo que la "h" no va en ese lugar, progresa sin remisión dentro de mi cráneo; pobre de mí, pronto no me acordaré de donde escondo los billetes de color lila.
Paso al post de abajo, a ver.....
creo que no tendré el problema de Antonio con los de color lila...no por el alzheimer...sino por que huelga en mi bolsillo...."el que te copia es que te admira"...ese es el problema del de Avellaneda...que era un fan de Don Miguel...un saludo
Y cómo me gusta que te enrolles, querido Sanchico.
Quién sabe si no fue la envidia, sino la venganza...
Sanchico, no tengas encuenta los comentarios de tus amigos, ya sabes que el curso está terminando y los nervios están....., Tu ex-churri y la Vane, me dan que se han aliado, ten cuidado con estás dos, que tienen un peligro...., tu no hagas caso a nadie, tu danos buenos momentos como este, lo demás da igual, besitos.
Jan:lo único que se puede hacer es evitar que el envidioso te haga daño, porque los envidiosos pasan a la acción.
Antonio: yo tampoco sé si es del Quijote. La frase es buena, de todas maneras.Las historias de Sanchico las escribe siempre Ele Bergón,Luz del Olmo,la autora de esos libros de poemas que figuran en la otra entrada.Yo tampoco sé donde dejé los de color lila...
Manuel:el mejor fan de Cervantes, el Avellaneda, seguro.
Silvia:le das buenos consejos a este chico, pero no escarmienta con las chicas.
Pedro: pongo tu comentario en la entrada.
Besos a todos
Buenas noches.
¡Cuanto buen amigo hay por aqui...!
Muchas gracias, estimada abejita, por tu visita a mi blog y por el lindo comentario que alli dejaste. Has sido muy amable.
Te visitare con frecuencia...!
Un muy cordial saludo!
(Con tu permiso, me dirijo a Antonio Aguilera: amigo Antonio, Quevedo es el autor de la frase sobre la envidia).
Abejita:
Tuve que salir el otro dìa "corre que te pillo"; ahora he vuelto porque no recordaba por donde me quedè.
Pero me voy igual de corriendo..............
Espero mañana que tenemos fiesta local, poder sentarme un rato.
Gracias a Cornelivs por recordar la autorìa de la frase.
Hasta luego, abejita
Cornelius: ésta es tu casa.¡Gracias por aclaranos la autoría de la frase que nos trajo Antonio!
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