martes, 23 de febrero de 2010
Hoy es 23 F, compartamos nuestra peripecia de aquella tarde.
Revista Cambio 16 ( 2 marzo 1981)
Revista Cambio 16 ( 2 marzo 1981), "Anatomía de un instante" (Javier Cercas, editorial Mondadori, Barcelona 2009)
Había crisis económica ¿os suena? Atención a la viñeta.
Publicidad " pija" de los 80.
Dice Javier Cercas en el prólogo de "Anatomía de un instante":
"El golpe del 23 de febrero convive con una anomalía: que yo sepa, es el único golpe en la historia grabado por televisión, y el hecho de que haya sido filmado es al mismo tiempo su garantía de realidad y su garantía de irrealidad...
Ningún español que tuviera uso de razón el 23 de febrero de 1981 ha olvidado su peripecia de aquella tarde, y muchas personas dotadas de buena memoria recuerdan con pormenor-qué hora era, dónde estaban, con quién estaban-haber visto en directo y por televisión la entrada en el Congreso del teniente coronel Tejero y sus guardias civiles, hasta el punto que estarían dispuestos a jurar por lo más sagrado que se trata de un recuerdo real. No lo es : aunque la radio retransmitió en directo el golpe, las imágenes de televisión sólo se emitieron tras la liberación del Congreso secuestrado, poco después de las doce y media de la mañana del día 24, y apenas fueron contempladas en directo por un puñado de periodistas y técnicos de Televisión Española..."
Compartamos nuestra peripecia de aquella tarde. ¿Alguien lo vio en directo?
Ese dia cumplí 16 años. Todo me sonaba como una pelicula...tenia una pastosa sensación de irrealidad, no sabia si aquello estaba sucediendo.
ResponderEliminarBesos...!
Aun recuerdo las sensaciones de aquel día y la noche de los tansistores.
ResponderEliminarSigamos vigilantes para que no se repita.
Abejita, yo estaba en Toronto y recuerdo que un amigo griego nos dijo a mi colega y a mi que había habido un atraco al congreso por parte de la guardia civil. Rápidamente compramos el "Globe and Mail" ("El País" de Toronto)y ¡nos embargó una vergüenza ajena al ver a Tejero con su tricornio y pistola en esa foto! No, no la podré olvidar en la vida.
ResponderEliminarPero no dejemos bajar la guardia porque intuyo, lo huelo, que esta vez la ultraderecha está ganando terreno. ¡Líbrenos! si consiguen llegar al poder. Besotes, M.
Cornelivs: Felicidades, entonces. Buen día. Te sonaba a película porque eras muy jovencito.
ResponderEliminarPedro: vigilemos para que no haya nunca otra noche de transistores como aquella.
Merche: qué lejos estaba y qué vergüenza pasarías, aunque el amigo griego tenía su experiencia de golpes. A la ultraderecha no se la ha comido nunca el lobo, vive disfrazada con piel de cordero. Lo que se coló el otro día en tu blog...Líbrenos, cielooos.
Os contaré yo mi 23 F.
ResponderEliminarTenía 24 años, trabajaba y vivía en Legazpia (Guipúzcoa)y ...estaba de huelga,huelga de maestros interinos. Alguien dijo que, en esos casos, a los huelguistas, se los fusilaba.
Cuando Tejero entró en el Congreso, yo estaba en una asamblea, en Hernani, donde tuvimos que oír alguna lindeza acerca del futuro de los maestros castellanos. En ese momento, no sabía nada de lo ocurrido.
Me enteré, con otros compañeros, cuando, a la vuelta, paramos en Beasáin a tomar algo. Allí alguien nos lo contó y aquella merienda se nos atragantó.
Todavía nos quedaba una reunión con los padres de los niños, que nos pusieron de vuelta y media por haber hecho huelga.
Terminé aquel día con mal cuerpo por lo de Hernani, lo de los padres y lo del golpe de estado. Un día inolvidable. En casa, llorera con mis compas de piso, también de Burgos. No íbamos a ver más a la familia...
Nos acostamos cuando salió el Rey, más tranquilas. Al día siguiente,a la escuela, donde otra maestra iba a clase con un televisor bajo el brazo.
Terrible día.
Yo estaba en mi casa oyendo la radio que transmitia la investidura de Calvo Sotelo. Lo oi, hasta donde me dejaron, todo en directo. Me asute tanto que llame rapidamente a mis hijos que jugaban en el patio de la casa donde viviamos, un piso de Vicalvaro y les hice entrar en casa. DEspues me puse a hablar con los vecinos en el descansillo. Justo cuando estaba discutiendo sobre el terrosimo de estado, llego mi marido y me empujo hasta dentro de casa, cerro la puerta y me pidio que dejase de hablar.
ResponderEliminarHoras, tensas muy tensa.s Pero yo este año lo habia olvidado por completo.
Un abrazo abejita.
Cercas está en lo cierto, la investidura no se retransmitía en directo por tv.
ResponderEliminarYo entonces estaba en la mili. Recuerdo que a esas horas estábamos merendando al lado de una radio que teníamos en la batería, lo escuchamos en directo. Al poco rato llegaron todos los oficiales, nos formaron, nos repartieron los cetmes con munición y nos hicieron estar tres días con todo a cuestas, incluso para dormir.
Yo tenía bien claro que no iba a tirar ningún tiro contra nadie, pero el miedo te lo metieron en el cuerpo. Era en Tenerife.
Ahora lo cuentas como una batallita, pero entonces lo pasamos mal: había costado mucho traer la democracia para que ahora viniera un salvapatrias a ponerlo todo patas arriba.
Se me olvidó decirte que la entrada está muy bien documentada. Muy interesante que guardes las revists tantos años. José Quevedo y Francisco Azorín, vaya dos apellidos, aunque se dediquen a la estadística. Qué ilusión había aquellos años por cumplir los requisitos que daban entrada a Europa.
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ResponderEliminarYo, con mis 4 añitos para 5, no me acuerdo de nada de nada. Sólo que así de lejos me suenan las frases de "¡se sienten, coño!"
ResponderEliminarPero lo mejor de estas fechas es que se olviden. Como el 20-N, o el 18-J.
Bueno, más que olvidarlas, que pasen desapercibidas.
ResponderEliminarPancho: si mi 23 F fue malo, el tuyo fue peor.Cargado con el equipo durante tres días y preparado para ir a la guerra. Se lo contarás a tus nietos algún día. Las cosas del abuelo Celestino...
ResponderEliminarLa revista ha rodado por mis destinos en tres comunidades autónomas y es un milagro que haya sobrevivido. No suelo guardar las revistas, por problema de espacio y es una pena. Pero ésta era imposible tirarla.
No me había fijado en esos nombres tan literarios de los estadísticos. Lo de la CEE llama la atención, visto desde ahora. Como tú dices: qué ilusión por cumplir requisitos.
Ele: qué escena. David, Julio para adentro, que hay golpe de estado.Papá está muy serio, mami. Horas muy tensas, que teníamos olvidadas. Yo este año me acordé porque tropecé con el Cambio 16, por casualidad.
Jódar, Valladolid, Toronto, Velilla de San Antonio, Tenerife, Legazpia, Burgos...nadie quería dictadura.
Un beso y gracias amigos por compartir los recuerdos de aquella tarde de pesadilla.
Pues yo tampoco recuerdo nada. Con 6 añitos sólo pensaba en las barriguitas. Todos los recuerdos que tengo son los que he ido recopilando de los documentales que ponen en la tele.
ResponderEliminarNo hay que conmemorar estas fechas, aunque tampoco hay que olvidarlas. País que olvida su historia, país que la repite.
Mosca: mejor que pasen desapercibidas esas fechas, la del 18 de julio, no digamos.
ResponderEliminarEs normal que no te acuerdes de eso que tu madre recuerda tan bien.
Besos para ti y la arañita.
Arañitaaaa
ResponderEliminarLos niños de ahora no conocen ni a los Barriguitas...ni a Tejero. Lo primero merece la pena, lo segundo nooo. Estamos comunicándonos casi como en un chat. Estupendo.
Besooos
He leido todos los comentarios, especialmente, el de PANCHO me ha sobrecogido... ¡¡Pobre, durmiendo con los Cetmes a cuestas!! Los soldaditos (haciendo la mili) debieron ¡alucinar en colores! Besotes, M.
ResponderEliminarAunque tu experiencia en Hernani tampoco fue moco de pavo... Besotes de nuevo, M.
ResponderEliminarLo recuerdo con tanta claridad que aún me cuesta leer sobre ello,por eso no compré aún el libro de Cercas,yo,tenía 25 años,volvía de trabajar en una escuela en el centro de Mallorca(María de la Salud)era maestra sustituta y esa vez me tocaba sustituir al director,tenía que tomar dos coches ida y vuelta para conseguir mantener ese puesto de trabajo que era por meses,todo era bastante duro,aunque no suelo decir que más que en estos tiempos,pero las carreteras, la falta de línea de autobuses,la crisis y las sustituciones,todo era duro aunque la ilusión de la juventud y tener una niña casi con dos añitos,hacía que se sobrellevara con más alegría,aquel día pasé mucho miedo desde esa tarde que nos enteramos por la radio del coche,mi marido y yo no pudimos dormir en toda la noche y al día siguiente pasamos la mañana con los niños de 5º escuchando lo que ocurría,luego nos tranquilizamos pero ha sido el tiempo el que ha hecho que esté más tranquila.
ResponderEliminarAquel golpe se veía venir desde meses atrás y el hecho de que no saliera bien,no significaba que no pudiera volver a ocurrir.
Hemos superado varias crisis económicas,en los 70,80 y 90 pero esta actual tiene el riesgo de que abarca a muchos países,a los más poderosos y a la vez.
Abrazos
Merche: no fue moco de pavo, no. Sin Cetme, pero fue duro.
ResponderEliminarCosmo: veo que teníamos una edad y un trabajo parecido.La ilusión de aquellos primeros trabajos, a pesar de todo, es un bello recuerdo, a pesar de los malos medios de transporte,las oposiciones, las aulas sin calefacción, las asambleas desagradables, las madres indagando el paradero de una goma...
Espero que esta crisis se vaya como se fue aquella.
Gracias, amigas por compartir recuerdos.